Las alteraciones del habla se refieren a una amplia serie de trastornos relacionados con la capacidad de hablar. Como este proceso es muy complicado y se encuentra bajo la dirección de diversas zonas del cerebro, tanto las causas como el tratamiento presentan gran diversidad de posibilidades. En algunos casos, la dificultad o imposibilidad para hablar no se verá acompañada de problemas de comprensión o entendimiento de lo escuchado, para este tipo de pacientes la enfermedad es especialmente cruel.

Causas

Alteraciones ocasionadas por malformaciones en el aparato de fonación. Cualquier defecto en las cuerdas vocales, la laringe, la lengua o, en general, cualquier órgano implicado en el proceso de comunicación, puede interferir en el habla. Se dice en este caso que existe un impedimento técnico. Sus manifestaciones pueden ir desde una leve dificultad para hablar hasta el mutismo total.

Alteraciones ocasionadas por problemas en el oído. En este caso, la persona sorda de nacimiento no habla porque no ha tenido ocasión de aprender. Para solucionar este problema es precisa una educación especial de la persona afectada, pues puede llegar a hablar correctamente, ya que no existe impedimento físico para ello.

Alteraciones ocasionadas por daños en el cerebro. El lenguaje es controlado por varias partes de este órgano. Un trastorno en cualquiera de ellas (enfermedades, accidentes) creará problemas a la hora de hablar. Es en este terreno donde se producen las disfunciones más complicadas y de más difícil solución, como la disartria. A menudo la persona conserva la capacidad de hablar y de entender, pero es incapaz de emitir mensajes coherentes. Este último tipo de trastornos se conoce con el nombre de afasias.

Alteraciones ocasionadas por problemas en el sistema nervioso. Algunas enfermedades pueden influir en el habla. Por ejemplo, la meningitis o la parálisis cerebral. Este apartado se encuentra íntimamente relacionado con el anterior.

Síntomas

Dada su gran variedad, existe también una enorme cantidad de síntomas, según el trastorno del habla de que se trate.

El grupo relacionado con las disfunciones en el aparato de fonación manifiesta dificultades más o menos intensas para hablar. Se trata de un problema físico, puesto que la persona es capaz de comprender y puede, por ejemplo, comunicarse por escrito sin el menor problema. Algo parecido ocurre con las personas sordas de nacimiento, que pueden llegar a aprender a hablar tras un periodo de aprendizaje.

Por el contrario, las alteraciones producidas por daños en el cerebro y en el sistema nervioso presentan una mayor dificultad para su estudio.

Las afasias son variadas. Las afasias de conducción y de Wernicke muestran un habla fluida, pero a menudo es algo incoherente. El paciente no encuentra la palabra adecuada y usa cualquier otra. Tiene problemas para comprender y repetir mensajes tanto hablados como escritos. La afasia de Broca se caracteriza por un habla dificultosa. El afectado es incapaz de encontrar la palabra adecuada. La disartria consiste en una intensa dificultad para formar las palabras. Es ante todo un problema de pronunciación.

 

Fuente: Enciclopedia Británica