No fue hasta el siglo 20 que surge la necesidad de crear formas prácticas en las técnicas de meditación a nivel popular, donde la demanda Occidental por aprender a meditar, comenzó a hacerse sentir. Para la mayor parte de estos individuos New Age los sistemas de meditación eran poco más que una copia de las técnicas de las versiones mayores, que habían sido sacadas de sus contextos religiosos. Como por ejemplo la Trascendental Meditación (TM), propagado por Maharishi Mahesh Yogi, es una versión, que surgió de la práctica hindú de “japa Naam” o “japa yoga” durante el año 1960.
Las técnicas existentes de meditación se pueden clasificar en dos secciones bastante amplias:
Meditación por concentración
La meditación por concentración centra la atención en la respiración, una imagen o un sonido (mantra), a fin de aquietar la mente y permitir una mayor conciencia y claridad.
La forma más simple de concentración en meditación es sentarse tranquilamente y centrar la atención en la respiración. El Yoga y los maestros en meditación creen que existe una correlación directa entre un `s aliento y un `s estado de la mente. Por ejemplo, cuando una persona está ansiosa, asustada, agitada, o distraída, el aliento tiende a ser superficial, rápido y desigual.
Por otro lado, cuando la mente está tranquila, centrada, y en armonía, el aliento es lento, profundo y regular. Concentrar la mente en el ritmo continuo de la inhalación y la exhalación proporciona un objeto natural de la meditación. En cuanto a centrar su conciencia en la respiración, la mente se sumerge en el ritmo de inhalación y exhalación. Como resultado, su respiración será más lenta y más profunda, y la mente se vuelve más tranquila y consciente.
La Trascendental Meditación o yoga Nidra (popularizada por la Bihar School of Yoga), que debe su origen a las antiguas técnicas de meditación hindú, apuntan hacia una estructura totalmente independiente de la mente. Estas formas de alentar al individuo a retirarse a lo interno, en el «mundo real», lejos de las «ilusiones» (maya) y de las influencias externas. Prácticas de meditación como el yoga mantra, por ejemplo, induce a la mente a concentrarse en un sonido, el sagrado ritual de cantos, hasta que se alcanza el estado de trance de “samadhi” (estado de la mente, donde sólo es sensible a las impresiones subjetivas).
Técnica del Zen Meditador
La atención plena en la meditación consiste en enfocar la atención a tomar conciencia del desfile continuo del paso de sensaciones y sentimientos, imágenes, pensamientos, sonidos, olores, y así sucesivamente, sin involucrar su pensamiento en ellos. El meditador se sienta en silencio y simplemente es testigos de lo que pasa por la mente, no reaccionar y no se involucra con los pensamientos, recuerdos, preocupaciones, o imágenes.
Esto ayuda a obtener un estado substancial más tranquilo, claro, y no mental. La técnica del Zen meditador basada en principios, como Thich Nhat Hanh `s (la sede en Francia, Vietnam Zen) la principal atención en la meditación o Vipassana, que fue promovida por S.N. Goenka, se centran más en el presente, el aquí y ahora.
Esto se logra sin juzgar la observación del aliento y las sensaciones en el cuerpo muy profundamente. El objetivo es alcanzar la perfecta concentración sin bloquear las distracciones externas. Para alcanzar un estado ideal de la ecuanimidad y objetividad. Pero si uno adopta el método del yogui, ajeno al mundo exterior, o la de la Zen meditador, profundamente en sintonía con su medio ambiente, la idea es aprovechar los vastos recursos de energía y de iluminación inherente a todos nosotros. Para encontrar sin esfuerzo en el interior, lo que había buscado, sin éxito, en el exterior.
Estas técnicas son esenciales en el arte y la ciencia de la meditación.
